No tengo ni idea de cómo es una subasta de Christie's. Perdón, lo confieso, soy de provincias. Puesta a ser sincera confieso, incluso, que he googleado el nombre de la archifamosa casa de subastas para asegurarme de escribirlo bien. A lo que vamos: que me tengo que imaginar, basándome en mi extensa memoria cinematográfica, cómo podría haber resonado la voz del encargado de la última subasta de la filial de Christie's en Hong Kong cuando adjudicaba un Diamond Birkin de color fucsia: 1,72 millones de dólares de Hong Kong a la una...